Cornai Orr no es el primer niño que se lesiona en un parque, pero puede que sea el primero que se lesiona por culpa de un urinario. A principios de esta semana, Orr iba al baño en el parque Crandon cuando el urinario en el que estaba se cayó de la pared, le destrozó el pie y le causó lesiones graves y permanentes. Orr tuvo que ser trasladado en ambulancia al hospital, donde le diagnosticaron fractura de pie y lesiones nerviosas. Tiene doce años y no puede ir a un campamento de verano ni pasar tiempo con sus amigos, como había planeado para el verano. En su lugar, Orr lleva muletas y espera que el daño nervioso sea sólo temporal.
Más sobre este caso
La madre de Orr, Kevisia Cain, estaba con él en el parque y ha declarado que el accidente fue un shock. La conexión del urinario a la pared estaba oxidada, y a Cain le preocupa que los demás urinarios puedan estar en las mismas condiciones, poniendo en peligro a otras personas.
Según el Departamento de Parques de Miami-Dade, los baños habían sido limpiados e inspeccionados apenas unas horas antes del accidente. Jorge Mora, del Departamento de Parques, dijo que nunca había oído hablar de un urinario que se cayera solo. Hizo inspeccionar todos los demás urinarios para asegurarse de que eran seguros, y no se encontró ningún otro urinario suelto. El condado ya está construyendo nuevos baños en Crandon Park.
Las medidas adoptadas por el condado contribuirán en gran medida a prevenir futuras lesiones, pero es posible que aún tengan que pagar por ésta. La familia de Orr puede reclamar daños y perjuicios por la lesión, las facturas médicas, posiblemente los gastos del campamento de verano y el trauma emocional. Orr ha declarado que no puede dormir por las noches y que tendrá que pasar al menos un mes escayolado, lo que probablemente le parecerá toda una vida a este niño de doce años.
El condado puede ser responsable de este accidente porque es responsable de garantizar que el parque sea un entorno razonablemente seguro. La falta de mantenimiento adecuado constituye negligencia si se tenía o se debería haber tenido conocimiento del peligro. Los urinarios oxidados que se caen son una prueba contundente de que no están en condiciones razonablemente seguras, lo que indica negligencia. La carga, sin embargo, sigue recayendo en el demandante para demostrar que el Condado sabía o debería haber sabido de la existencia de una condición peligrosa. Dado que el Condado declaró que realizaba el mantenimiento y las inspecciones del cuarto de baño con ese urinario, se deduce que el óxido debería haberse encontrado durante la inspección.
Probar su caso en una acción de responsabilidad de las premisas contra el Condado de Miami-Dade no es una tarea sencilla. Se requiere el conocimiento y la experiencia de un abogado de lesiones personales experimentado que está preparado para investigar agresivamente y abogar en nombre de la persona que se lesiona.
Si usted o alguien que usted conoce requiere un Abogado de Lesiones Personales en Miami por un accidente o lesión este verano, Aigen Injury Law, está aquí para asistirle. Por favor, no dude en enviar una REVISIÓN DE CASO GRATIS en línea. En Aigen Injury Law, un abogado experimentado está disponible 24 horas al día, siete días a la semana trabajando sin descanso en nombre de las víctimas que sufren de todo tipo de accidentes - incluso los relacionados con urinarios. Ofrecemos una consulta gratuita para su caso de lesiones personales y no hay honorarios a menos que recuperemos para usted.